El día que los españoles perdieron la memoria

Juan Vte. Santacreu – 25/5/2019 - En muchas ocasiones hemos oído la frase "tienes menos memoria que un pez", pues bien, esto es totalmente falso. Se ha demostrado científicamente que los peces pueden tener memoria hasta quince días, y algunas especies mucho más, todo lo contrario que le ocurre en época electoral al ganado ibérico que es capaz de recordar hechos históricos de hace cuarenta años aunque no los haya vivido, en cambio es incapaz de recordar las putada que sus amos, los políticos, le gastaron ayer.

El español en sí mismo no es idiota, es bastante racional y en condiciones normales no olvida, de hecho el españolito de a pié sabe que los políticos suben el IVA cuando las cosas van mal y cuando la economía rezuma abundancia no lo bajan. Todos saben que en España se paga por todo, los impuestos directos y camuflados inundan todos los bienes y servicios, el 70% del recibo del agua son impuestos, el 60% del recibo eléctrico son impuestos y tasas, etc., todo esto lo saben los ciudadanos porque son racionales la mayor parte del tiempo, pero ¿qué ocurre en las elecciones?

No se sabe a ciencia cierta qué pasa en los días previos a unas elecciones, unos dicen que nos ponen algo en el agua, otros que los políticos en los mítines con sus cazadoras de pana de mercadillo nos lavan el cerebro pero lo cierto es que algo ocurre para reconvertir a la mayoría de los ciudadanos de racionales en viscerales, y ahí amigo mío es cuando la razón deja paso a la pasión.



Así podemos ver cómo los ciudadanos de izquierdas votan a Podemos o a un PSOE que atacan a las empresas eléctricas acusándolas del encarecimiento del recibo eléctrico sin que nadie se levante y les coloree la cara recordándoles que si tenemos la electricidad más cara de Europa es exclusivamente por los impuestos. Tampoco vemos a ningún votante de izquierdas que se queje de que sus políticos les inviten a ir en bici mientras ellos se pasean en Audi Black, o que les coman el tarro con la contaminación del plástico sin que nadie les diga que un solo viaje en el Falcon presidencial contamina lo equivalente a todos las bolsas de plástico que se consumen en un año en España. Y hablando de plásticos, Mercadona ganó gracias a las supuestas leyes ecológicas en el mes de abril de este año 400.000 euros por la venta de bolsas de plástico. Conclusión, los más pobres antes tenían las bolsas de basura gratis y ahora las tiene que pagar. ¿Y sobre los impuestos de sucesiones, o los impuestos digitales de autor que pagamos todos para mantener a una panda de vividores?

Todo esto y mucho más sucede ante el silencio de la masa borreguera sin que nadie alce la voz contra sus políticos de izquierdas. ¿Y sabes por qué? Porque sus políticos le tiene tomada la medida a su ganado, solo tienen que soltar cuatro frases como "llegan los franquistas", "la extrema derecha", etc., e inexorablemente la visceralidad les nubla la razón.

A los votantes de derecha les pasa exactamente lo mismo, cuatro proclamas en contra de los izquierdosos, de Lenin y de la madre que los parió y todos como buenos borregos votan al PP o a sus partidos correspondientes sin pensar que todos los políticos, de uno y otro color, son responsables de los impuestos, de las prohibiciones y del derroche institucional que sufrimos los esclavos de la democracia. Como he dicho en muchas ocasiones la peor esclavitud es aquella donde los esclavos no son conscientes de su esclavitud.

El día que los españoles perdieron la memoria se convirtieron en esclavos democráticos por cuatro años más.
Así lo pienso y así lo digo.